Venezuela hoy

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enero 01, 2006

Unidad del Caribe a la Tierra del Fuego


Mariela Pérez Valenzuela, (Especial desde Venezuela)

CARACAS.- El reciente ingreso de Venezuela como quinto miembro pleno al Mercado Común del Sur (MERCOSUR) constituye un hecho de enorme trascendencia política en la integración de América Latina, que cada vez cierra más las brechas que la separaron durante décadas, creando ahora nuevas formas de cooperación, alejadas de los tradicionales mecanismos capitalistas existentes en la región.

La adhesión oficial de este país al bloque regional que fundaron en 1991 Argentina, Paraguay, Brasil y Uruguay apunta a una nueva etapa en las relaciones de la agrupación, que tuvo su principal basamento en aspectos comerciales, y significará, también, el fortalecimiento de los lazos de Caracas con países con los que ejecuta importantes proyectos, en especial en materia energética.
Hacia esa dirección señala el compromiso asumido por Venezuela, Argentina y Brasil de construir un gasoducto que les unirá a lo largo de ocho mil kilómetros, y que permitirá el suministro de combustible a otros Estados, como parte de los esfuerzos conjuntos para lograr la integración petrolera de la región.
El acuerdo suscrito durante la recién finalizada cumbre del MERCOSUR celebrada en Montevideo, Uruguay, constituye otro paso de avance en la iniciativa promovida por el presidente Hugo Chávez de crear el anillo energético que una al continente.
Venezuela es el quinto exportador mundial de petróleo y uno de los propósitos anunciados por el Gobierno es lograr la independencia de los países latinoamericanos del mercado petrolero mundial, donde los precios del crudo están vedados a esta región, en la que priman los estados de economías débiles y dependientes de Estados Unidos.
En ese interés, en el que prima la colaboración desinteresada entre los pueblos, fue creada con anterioridad la empresa estatal Petrosur que, al igual que Petrocaribe, tiene su fundamento en el criterio de Chávez de que los recursos energéticos de su país deben servir para aliviar la situación de otros estados vecinos.
En momentos en que en América Latina y el Caribe 222 millones de personas viven en la pobreza en gran medida por la implantación de políticas neoliberales, Chávez señaló que el MERCOSUR del siglo XXI debe colocar lo social como bandera prioritaria.
Necesitamos un MERCOSUR que atienda la pobreza, la exclusión, el analfabetismo, la desnutrición, el hambre y la miseria de las grandes masas, sostuvo el mandatario en Montevideo, donde quedó oficializada la entrada de este país en el grupo, en el que también hay varias naciones observadoras.

En ese sentido, el canciller uruguayo, Reinaldo Cargano, destacó que la incorporación de Venezuela es un hecho de enorme significación desde el punto de vista geográfico y estratégico, porque “los países de América van a tener una línea de comunicación común, desde el Caribe a la Tierra del Fuego”.
Con su ingreso al MERCOSUR Venezuela asume el sueño bolivariano de que la unidad de nuestros pueblos no es simple quimera de los hombres, sino inexorable decreto del destino.